LEY 3954 - REZONIFICACION DE BARRACAS

En la sesión del 13.10.11 la Legislatura aprobó por unanimidad la Ley 3954 que limita las alturas de la nuevas obras en cuadras de casas bajas preservando las construcciones históricas del barrio.
Un trabajo conjunto de vecinos y legisladores desarrollado a lo largo de cuatro años que rinde sus frutos para Barracas y la Ciudad.

¡GRACIAS A LOS 5000 VECINOS QUE LO APOYARON CON SUS FIRMAS!

--------------------------------------------oOo--------------------------------------------

viernes, 3 de mayo de 2013

ADECUADO



A principios de diciembre de 2012 habíamos detectado posibles irregularidades en la obra en curso en Hornos 810, casi esquina Aristóbulo del Valle.


Allí, un cartel de obra y un aviso de una inmobiliaria barraquense anunciaban la construcción de un edificio de 10 pisos en una zona donde a partir de la sanción de la ley 3954 en noviembre de 2011 no pueden construirse más de 4 niveles:





El caso contenía un dato muy particular: aparentemente no se trataba de una obra iniciada ilegalmente por un constructor, sino que contaba con un permiso oficialmente otorgado por la Dirección General de Registro de Obras y Catastro (DGROC) con número de expediente 742.676/2012 del 15 de agosto de 2012. 

Es decir, el Gobierno de la Ciudad había autorizado una obra con una zonificación que se había modificado 9 meses antes.


Se efectuaron las denuncias correspondientes en el GCBA y, dada la urgencia del caso, intervino directamente el Defensor del Pueblo Adjunto Gerardo Gómez Coronado en persona, hasta mereciendo un artículo Página 12: http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/m2/10-2407-2012-12-08.html

El resultado fue la anulación del registro del plano y la intimación a adecuar el proyecto a la normativa vigente. 

La explicación oficial de la DGROC fue que el error se debió a la “desactualización del  sistema informático” en el cual no se habían cargado los datos correspondientes a la nueva zonificación.

A continuación publicamos  los documentos oficiales del GCBA, donde se informa del error y queda expresada la aceptación del propietario y el profesional a presentar un proyecto ajustándose a la altura realmente permitida.




Algunas consideraciones al respecto:

La DGROC admite su error al aprobar el plano pero inmediatamente intima al profesional a que regularice la situación en el plazo de 20 días bajo apercibimiento de aplicarle penalidades como la suspensión del uso de la firma en la Ciudad. Esto es, se equivoca el funcionario pero la culpa la tiene el profesional!

La DGROC adjudica su error a la desactualización del sistema informático. Es realmente preocupante que el GCBA no tenga al día sus bases de datos conteniendo los cambios en las normativas.  Si el mismísimo GCBA no brinda información confiable sobre su propio Código de Planeamiento Urbano…¿quién podría hacerlo?

Sin embargo, Proteger Barracas constató oportunamente que a fines de abril de 2012 ya estaban actualizadas  y disponibles para consulta del público las planchetas 18 y 24 que contenían los cambios introducidos por la ley 3954. Así lo publicábamos el 26.04.12: http://www.protegerbarracas.blogspot.com.ar/2012/04/al-dia.html
 
Siendo que el expediente de la obra se aprobó en agosto de 2012, cuesta entender a qué desactualización se refiere la DGROC para justificarse, cuando el 21 de mayo de 2012 (tres meses antes) se habían registrado los planos de la obra de Uspallata 765 con la zonificación al día. 

Y por último, y no menos preocupante que todo lo anterior, resulta el hecho de que muchas veces somos los vecinos quienes tenemos que vigilar y alertar sobre las obras irregulares. 

¿Qué hacen los inspectores? 

¿Cuántos casos similares a este se habrán pasado por alto?

¿Qué hubiese pasado si la obra hubiese estado más avanzada? ¿Se habría intimado a demoler el exceso de superficie? ¿Quién habría asumido los costos y las responsabilidades?

--------


1 comentario:

Leticia dijo...

Como ciudadanos parece que no podemos ni parpadear porque ya nos perdimos algo. Además de las responsabilidades de nuestra vida cotidiana parece que no podemos dejar de ejercer el rol de contralor que le corresponde al mismo Estado, donde "regula el regulado""